Desde el puente de diciembre, vivimos una racha muy positiva para los comerciantes y hosteleros, siendo nochebuena y nochevieja los mejores días. Diciembre comenzó con la esperanza de que el consumo remontara en el último mes del año y así poder salvar una mala temporada, como ha venido ocurriendo en los últimos años marcados por la crisis económica. Diciembre no ha defraudado y tanto comerciantes como hosteleros aseguran que la Navidad ha resultado positiva.
Si los comerciantes señalaban la semana pasada que la Navidad, de hecho, les ha dado un respiro y que permitirá a muchos mantener abiertos sus negocios un tiempo más, ayer los hosteleros coincidieron en su análisis.
Aunque hay quienes aseguran que han sido buenos solo días señalados y no el conjunto de las fiestas, también los hay que afirman con rotundidad que esta Navidad ha estado muy animada en la ciudad del Jerte y que ha resultado no solo mejor de lo que se esperaba sino mejor también que los dos años anteriores.
«En nuestro caso la barra ha funcionado muy bien todos los días, y ha habido también momentos en los que hemos tenido que rechazar peticiones para el comedor porque estaba lleno», aseguró ayer Antonio Gutiérrez, del bar Gredos.
Una opinión positiva en la que coinciden El Globo, Manjuli, Torero, Español… Para todos la Navidad ha resultado mejor de lo que se esperaba, ha supuesto un respiro y ha contribuido a salvar la temporada. A ello también ha ayudado el buen tiempo que ha marcado estas fiestas navideñas en Plasencia. «La verdad es que ha sido bastante positiva, mejor de lo que se esperaba, pero en nuestro caso no han sido todas las fiestas sino días puntuales», matizó ayer Francisco Castellano, del bar El Globo.
Nochebuena y Nochevieja, fundamentalmente en las cañas, han sido los dos mejores días de esta Navidad para los hosteleros de la Plaza Mayor donde se concentran las salidas, pero el conjunto de la Navidad ha logrado aliviar un mal año. En general todo el mes de diciembre. Los hosteleros placentinos también coinciden en que el trabajo se ha incrementado desde el puente de la Constitución y ya no ha decaído hasta el día de ayer, porque al puente le siguieron las comidas y cenas de empresa y después las fiestas navideñas.
Creen también que la buena racha cambiará ahora con enero y febrero, dos meses tradicionalmente malos para la hostelería local, hasta que en marzo y abril, con la fiesta del cerezo en flor y la Semana Santa, Plasencia entre en la época dorada para el sector turístico, lo que repercute de forma directa en el comercio y la hostelería.
Pero si la Navidad ha sido positiva para ambos sectores, porque las fiestas han sacado a la gente a la calle y han logrado remontar el consumo, estos días tienen también una cara menos amable. La asociación de vecinos de Intramuros denuncia que no ha habido vigilancia policial durante estas fiestas y que, por tanto, han sido muchos los ruidos que se ha producido en la calle impidiendo a los residentes del centro ejercer su derecho al descanso.
«No han sido solo los días puntuales, que sabíamos que había libertad de horario y que es normal que se salga, sino que han sido todos los días durante esta Navidad de forma general; ha dado igual que fuera un lunes que un viernes y esto lógicamente ha impedido que los residentes pudieran descansar, porque se ha bebido en la calle», señaló ayer Julián Gutiérrez, presidente de la asociación de vecinos de Intramuros. Además, según su versión, las llamadas a la Policía Local solicitando su presencia en algunas calles del centro no han sido atendidas. «Se nos decía que era Navidad», zanja Gutiérrez.
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